martes, 17 de marzo de 2009

La biblioteca del siglo XXI

No suelo prestar mucha atención a estas cosas, pero hoy he leído en el periódico una noticia (un apunte, más bien), sobre el papel del bibliotecario en el siglo…XXI (vamos ya por éste,¿no?). Pues resulta que dice que las funciones han cambiado, digamos, han evolucionado. Ahora los bibliotecarios tienen que saber informática a nivel de usuario avanzado (a nivel de usuario avanzado del año presente, que es muy distinto de ser usuario avanzado de hace 10 años). Y que enseñan a los usuarios “a desarrollar Presentaciones con PowerPoint o a crear vídeos en Internet”, porque "Los días en que el trabajo consistía sólo en devolver los libros a sus estantes son cosa del pasado". Ojo, se trata de una bibliotecaria escolar y estadounidense. Pero sí, las cosas cambian, y creo que si no es así las bibliotecas, las normales y corrientes, van dejando de tener sentido. Tienen libros, sí, revistas y periódicos, eso está bien, y conexión a Internet, que es ya fundamental. Pero si en vez de biblioteca ponemos una sala de estudio, y otra de conexión a Internet, la mayoría de necesidades que satisface la biblioteca tipo estarían igualmente cubiertas. Vamos, que el papel del bibliotecario es ya otro, bueno, no es otro, pero las tareas sí que deben adaptarse. Y se debe empezar por la formación del personal: ¿sabemos usar de manera avanzada las aplicaciones informáticas básicas: Office, PhotoShop, blogs y páginas web, y la multitud de servicios que ofrece Internet (como lo de colgar videos), además, claro, de conocer fuentes de información y esas cosas para poder realizar el trabajo de manera eficiente? Pues…yo estoy bastante justito, por así decirlo. En fin, que cada uno haga examen de conciencia.

Hay otro punto que quiero anotar, y es que en Estados Unidos, ese vasto país, tienen bibliotecarios escolares. Aquí no, o no mucho. Y creo que es necesario. Así como una estrecha relación entre el bibliotecario (siempre que digo “bibliotecario” quiero decir “equipo bibliotecario”) y el profesor (o profesorado, o equipo docente). Pero esto ya lo diré otro día.

martes, 10 de marzo de 2009

Geocultura: ubicador de bibliotecas

He descubierto lo que debería saber si leyera la prensa: que el Ministerio de Cultura ofrece un pequeño servicio que agradezco mucho: se llama Geocultura, y es sólo un google.maps adaptado a los servicios culturales; bueno, se puede explicar mejor.

Pues eso, que podemos buscar en el territorio español bibliotecas, archivos, museos, patrimonios de la Humanidad y otros (es decir, fundaciones, teatros, centros de documentación, museos privados, centros artísticos, etc.). Por cierto, MurciaSalud tiene lo mismo para centros de atención primaria, hospitales y esas cosas.



Y nada, que está chuli.

No sé si lo actualizan, pero se puede contactar con ellos. Sólo echo de menos más difusión del servicio, y un acceso mejor (¿cómo se llega a Geocultura desde la página principal del MCU?).



Esto es Madrid: bibliotecas y archivos




Esto es Murcia: bibliotecas y archivos


¿Madrid vs. Murcia? (sin comentarios)

La biblioteca Tomás Navarro Tomás del CSIC

Ayer asistí a una visita guiada por la biblioteca Tomás Navarro Tomás, perteneciente al CSIC. Y la verdad es que fue una experiencia muy agradable. Uf, si es que no se me ocurre de qué quejarme...
Pues resulta que es una biblioteca nueva, con una potente inversión y un gran alcance a nivel investigativo. No voy a entrar en datos, para eso podéis visitar la web, que está batante completita. Sólo algunos apuntes: tiene más de un millón de documentos, de los que 700000 están en libre acceso. Creo que está bastante bien. Todo está muy informatizado: hay máquinas de autopréstamo por radiofrecuencia (de lo que están muy orgullosos), y también de autodevolución; la distribución está muy trabajada, de manera que no haya que mover la colección en previsión a 10 años; los detalles (señalización, información, etc.) también está muy trabajada.

En cuanto al aspecto técnico, es bastante complejo, puesto que surge de la integración de 8 bibliotecas del CSIC: así, el inventario, la clasificación, etc. ha sido, como espero comprendan los profesionales, una tarea muy ardua. Pero quiero destacar que parece, según nos dijeros, que las decisiones que se tomaron fueron a partir de una base científica ( datos de uso, previsión, y esas cosas) y fueron partícipes el equipo bibliotecario. Claro, es de cajón: no lo organizó un director, sino un equipo de bibliotecarios, en acuerdo de los grupos de trabajo como la parte importante de los usuarios. Por supuesto que han habido algunos fallos, pero han sido mínimos.
Bueno, lo importante es el método de trabajo: se hacen las cosas bien, acorde a la lógica, las normas, y el principio de servicio al usuario. Vamos, que todos vemos fallos de base, errores de partida, en cualquier biblioteca (municipal, regional o nacional), pero el CSIC ha podido desarrollar una gestión realmente óptima. En otras palabras, que mejor sitio para trabajar no es fácil de encontrar.
Bueno, no me enrrollo más. Sólo que hay que seguir la pista, que al menos yo andaba bastante despistado.